✩ Punch holes in the sky!

Roxanne Dufour

Datos del Personaje

General

Nombre completo: Roxanne Dufour.
Edad: 17 años.
Género: Femenino.
Digimon acompañante: Poromon - Hawkmon - Aquilamon - Garudamon - Hououmon.
Nacionalidad: Francesa.
Orientación sexual: Homosexual.
Grupo: Tamer.

Personalidad

Roxie es una chica que a primera vista resulta ser lo que no es. Casi siempre se le puede ver haciendo la vaga, tirada en cualquier sitio y mirando las nubes pasar, pero en realidad es una chica muy atlética y competitiva, tanto, que lleva sus victorias siempre colgadas como una medalla, presumiendo de ellas, y por ello suele tomarse las derrotas bastante a mal.

A veces también puede ser un poco cabezota cuando algo se le mete entre ceja y ceja, pero eso significa que hace todo lo posible por conseguir sus metas. Eso sí, hará todo lo posible, pero nunca pisotearía a sus compañeros.

Esto nos lleva a su siguiente punto fuerte. El sentido del compañerismo y la lealtad de esta chica superan los límites humanos. Al principio puede ser un poco áspera con los recién conocidos, pero en cuanto ve que son merecedores de su confianza, Roxie nunca en la vida los abandonaría o los traicionaría, ya que valora mucho la amistad.

Además de buena compañera, Roxanne es una chica a la que le encanta gastar bromas en todo momento, desde las más inocentes hasta algunas que hacen que se lleve más de una reprimenda, actuando de una forma algo infantil para la edad que tiene. A pesar de todo, en el fondo Roxanne puede ser madura y guardar la compostura cuando es necesario, ya que tiene un alto respeto por sus superiores.

Apariencia

Podemos empezar a describir a Roxanne por su característica más destacable, y esta es que a pesar de ser una chica no es nada femenina en cuanto a aspecto físico. Esto lo decimos principalmente porque apenas tiene pecho, es algo alta para ser una chica y tiene los músculos levemente trabajados. No se le notan apenas pero se sabe que tiene demasiada fuerza para ser una chica.

Además de eso es una chica que no presta nada de atención a su aspecto físico y lo lleva todo descuidado. Suele ir con manchas en la cara e incluso en la ropa y se hace heridas y cicatrices, pero no le importa tener marcas. Ella se siente cómoda siendo así y opina que le dan un aspecto salvaje y algo intimidatorio en caso de enfrentarse a alguien.

Lo único que cuida de su aspecto posiblemente sea su pelo. Siempre lo lleva corto, un poco por encima de los hombros y desordenado, lo cual hace que aumente aún más su aspecto masculino, pero lo que más destaca de este es que le encanta llevarlo teñido. Aunque originalmente era de un rubio bastante claro, a ella no le gustaba ese aspecto, ya que hacía que pareciese enteramente blanca al no hacer contraste con su piel clara, por lo que al hacerse mayor, decidió pintarse el pelo arco iris para llevar orgullosa un emblema de lo que quedaba de su feminidad.

Por lo demás, tiene un rostro adornado por dos ojos algo puntiagudos de un color fucsia intenso, una nariz pequeña casi siempre cubierta con banditas a causa de sus rasguños, orejas pequeñas y labios finos que muestras una sonrisa confiada casi permanente.

En cuanto a vestimenta es fanática de la ropa cómoda que le permita moverse. Normalmente lleva vaqueros, no muy ajustados y de color azul oscuro, una camiseta algo ancha de color celeste con la marca de una nube y un rayo tricolor en ella. Sobre la camisa le gusta llevar la antigua cazadora marrón de su padre, ya que este no podía seguir usándola después del accidente, así que decidió llevarla ella para honrarle. A pesar de ser de su padre, Roxie le dio un pequeño toque personal colocándole un par de chapas a la cazadora, la cual complementa con sus botas marrones y sus gafas de aviador que siempre lleva en el pelo a modo de cinta.

Historia

La historia de Roxanne comienza situada en una pequeña ciudad francesa, concretamente en Toulouse. Allí fue donde la chica pasó los primeros años de su vida, todo tan normal como la vida de cualquier persona. Allí Roxanne tenía toda su vida, sus amistades, pero un día lo perdió todo.

Fue el día en el que, por razones de trabajo de su padre, toda la familia tuvo que mudarse a la capital del país.

En parte, para la familia aquello era mejor, ya que gracias al ascenso de su padre podrían vivir de forma más cómoda, pero por otro lado, esto hizo que la joven chica perdiese a la temprana edad de 9 años todo lo que tenía, toda la vida que había estado forjando en otro lugar.

El cambio se le hizo muy duro, siempre se sentía muy sola ya que hacer amistades desde tan de cero le costaba muchísimo. La chica pasó bastante tiempo sin compañía, pero esto hizo que su relación con sus padres creciese de forma positiva, siendo esto algo que cambiaría su vida para siempre aunque ella no lo supiese.

Roxanne se volvió muy apegada a su padre, quien todos los días le contaba las cosas que hacía trabajando para los DATS. Así fue cómo la pequeña Roxie empezó a tener conocimiento sobre los digimon. Su padre, al ser ella su hija, pensaba que borrarle la memoria sería algo cruel, por lo que en vez de hacer con su deber, siguió incumpliendo aquella norma hablándole más y más a la chica sobre los diferentes tipos de criaturas a las que se había enfrentado.

Gracias a aquello, la chica ya había descubierto cual sería su meta en la vida: Quería ser parte de los DATS, como su padre. Pensaba que el papel de heroína que se encargaba de mantener la paz y el orden entre ambos mundos era una tarea realmente digna, por lo que todos los días soñaba con cómo sería su digimon y cómo se veía a ella misma más crecida, trabajando junto a su progenitor.

Sin embargo, un día gran parte del sueño de la joven desapareció. Su padre había sufrido un terrible accidente mientras estaba en el mundo digital y había quedado paralítico de piernas para abajo, dejándolo incapacitado para seguir con su trabajo.

Aquello fue un duro golpe para toda la familia, por lo que Roxanne tuvo que dejar su sueño de lado y centrarse en intentar buscar un trabajo a medio tiempo para ayudar a su madre con los gastos monetarios.

Todo perduró de esta forma hasta que el día en el que Roxanne cumplió sus 16 años. Su padre la obsequió con un regalo muy especial, recordando las palabras de Roxanne varios años atrás.

Al abrir la caja, la chica encontró un huevo con unos estampados realmente curiosos y la cazadora marrón de su padre bajo este. La chica miró al hombre y le abrazó, con lágrimas en sus ojos. Ella hacía lo posible por no llorar en público, pero sabía lo que significaba aquello: Roxanne había sido obsequiada con un digimon, y con ello, su sueño comenzaría a tomar forma.

Con el paso del tiempo, la joven logró eclosionarlo, descubriendo que de este salió un pequeño y nervioso Pururumon. Ella conocía perfectamente a ese pequeño y a sus futuras digievoluciones, puesto que desde que su padre se lo mostró, lo había considerado como su favorito.

Gracias al cariño y a la fuerte relación establecida entre amos, Pururumon logro incluso subir un nivel más en su escala de digievoluciones, estando actualmente en estado de Poromon. Aún así, la entrada al mundo digital no le fue permitida hasta que la chica cumpliese sus 17 años.

Por suerte, la compañía de su digimon hizo que este último requisito se cumpliese más rápido de lo que pensaba, y cuando toda su familia vio que ya estaba preparada, Roxanne se introdujo a través de la pantalla de uno de los ordenadores de la casa y viajó hacia ese nuevo mundo desconocido, buscando llegar hasta el cielo y más junto a su digimon, y que ese hiciese lo mismo junto a ella.